BSPA. MATIAS ZELAYA CON EL TRIBUNO A LAS PUERTAS DE SU COLEGIO. |
Luego del accidente ocurrido el 25 de setiembre en la esquina de Balcarce y Arenales, de la capital salteña, cuando la camioneta oficial, en la que circulaba el vicegobernador y la candidata a Diputada Naconal,atropelló a dos jóvenes en una moto.
Poco después de lo sucedido, los enrriedos en la información salieron a la luz.
Es claro que Andrés Zottos se trasladaba, junto Cristina Fiore en una camioneta oficial. Ningún funcionario salteño puede estar al volante de un vehículo oficial. La segunda anomalía grave es la alteración de la documentación pública, dado que Zottos obligó a la policía a hacer aparecer como responsable del hecho a Daniel Aparicio, un colaborador quien, al momento del accidente, se encontraba en una cancha de fútbol.
Finalmente, sobran a esta altura indicios vehementes de que hubo fuertes presiones sobre la familia de las víctimas y de los testigos para que el hecho quedara en la penumbra.
Hubiera sido más sencillo decir la verdad.
- Testimonio inequívoco
El Tribuno dialogó el martes y ayer con Matías Zelaya, quien iba en la moto siniestrada junto con Erika Bravo. El joven fue inequívoco: aseguró que en el lugar del accidente sólo se encontraban Zottos, Fiore, su novia, inconsciente por el golpe, y él mismo. “La camioneta la manejaba uno de los dos: Zottos o Fiore”, dijo.
Ayer, el vicegobernador volvió a afirmar que el vehículo era conducido por Arancibia y aventuró que la entrevista con Zelaya era un invento de El Tribuno.
La foto habla por sí misma. Incluso, Zottos confundió el apellido de la víctima. El mismo día del accidente, la policía había informado correctamente la identidad del conductor de la moto y luego un vocero llamó al diario para cambiar el apellido de Zelaya por Celazo.
. “Si hay testigos del hecho, éstos deben dirigirse a la Justicia a denunciarme”, dijo, para luego agregar que no se va a amparar en fuero alguno si esto sucediese. Los testigos existen y son los que proporcionaron la información y las fotografías, y quienes aseguraron que es Zelaya, y no Zottos, quien dice la verdad. En las fotos, por cierto, no aparece Aparicio.
- Anomalías
El problema es complejo: Zottos desafía a los testigos a presentarse, pero nadie sabe dónde está radicada la denuncia del accidente. La intervención del 911 sacó el caso de la jurisdicción natural, que es la comisaría tercera. Por esta razón, la Tercera no confeccionó el acta única ni intervino en los hechos, no se tomaron declaraciones a los posibles testigos, como tampoco se secuestró el vehículo, ni se realizaron las pericias de rigor.
Como elemento legal solo existe una escueta exposición policial realizada por Matías Zelaya el día 26 de septiembre en la Comisaría 1.
Cabe preguntarse si algún fiscal penal tomó la “notitia criminis” expresada en fotos y testimonios para impulsar una causa. Tampoco se sabe si las víctimas del siniestro podrán cobrar la indemnización, ya que la aseguradora no cuenta con la documentación policial imprescindible para hacerla efectiva.
Zelaya presenta aún algunas lesiones en su mano izquierda. Su relato coincide con el de los vecinos. Hasta que las víctimas fueron subidas a la ambulancia, no había llegado aún Daniel Aparicio, el hombre que minutos después en el hospital se presentó como el chofer del vicegobernador y responsable del accidente vial. El joven dijo ayer a nuestro diario que se encuentra “muy presionado”. Su tío, Rodolfo Zacarías, dijo lo mismo a otros medios.
Fuente: El Tribuno
No hay comentarios:
Publicar un comentario