Francia estuvo conmocionada por el horrible crimen. El padre lo castigó por haber roto los dibujos de otro nene.
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| FOTO TOMADA DE LEPARISIEN.FR |
El pequeño Bastien había roto los dibujos de un compañero de la escuela. Su padre, Christophe Champenois, de 33 años, lo castigó metiéndolo en el lavarropas en marcha durante unos minutos.
Cuando la madre, Charlene, corrió a sacarlo, el niño estaba helado y con fuertes golpes. Desespearda, llamó a su vecina, Alice, para que la ayudara, y le dijo que Bastien se había caído de la escalera. "Lo alcé, y en mis brazos parecía un muñeco roto", contó Alice, según publicó el diario LeParisien.fr. "Charlene estaba petrificada, no comprendía que él estaba muerto", añadió.
Fue Maud, la hija de cinco años del matrimonio quien confesó la verdadera causa de la muerte de su hermano a Fidelio, el esposo de la vecina. También dijo que no era la primera vez que Christophe metía al pequeño en el lavarropas. También acostumbraba a encerrarlo en el placard durante hasta 10 horas.
La familia que estaba siendo vigilada por los servicios sociales desde 2006. Sin embargo, en los últimos años no notaron ningún comportamiento sospechoso y los niños gozaban de buena salud y no había ningún informe de malos tratos.
Cuando la madre, Charlene, corrió a sacarlo, el niño estaba helado y con fuertes golpes. Desespearda, llamó a su vecina, Alice, para que la ayudara, y le dijo que Bastien se había caído de la escalera. "Lo alcé, y en mis brazos parecía un muñeco roto", contó Alice, según publicó el diario LeParisien.fr. "Charlene estaba petrificada, no comprendía que él estaba muerto", añadió.
Fue Maud, la hija de cinco años del matrimonio quien confesó la verdadera causa de la muerte de su hermano a Fidelio, el esposo de la vecina. También dijo que no era la primera vez que Christophe metía al pequeño en el lavarropas. También acostumbraba a encerrarlo en el placard durante hasta 10 horas.
La familia que estaba siendo vigilada por los servicios sociales desde 2006. Sin embargo, en los últimos años no notaron ningún comportamiento sospechoso y los niños gozaban de buena salud y no había ningún informe de malos tratos.
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