martes, 18 de octubre de 2011

Callate, pendejo!

¿Para qué quieren más días de clases? ¿No se dan cuenta de que con pibes que piensan y cuestionan se puede ir todo al diablo? No importa, para eso está la impunidad del poder. Lo demostró el intendente de Embarcación, que hizo que el abanderado de un colegio sea despojado de su condición después de cuestionar su gestión públicamente.

Héctor Salomón, padre del que hasta hace unas horas era el abanderado del Instituto Juan Carlos Dávalos, de Embarcación, denunció que su hijo fue despojado de su premio por ser el mejor alumno después de haber cuestionado públicamente al intendente local.

En Cadena Máxima, Salomón relató que el intendente Alfredo Miguel Llaya “visitó la escuela y expuso sobre los actos de gobierno, manifestando que es el responsable de la obra de la ruta 51, entre otras cosas, circunstancias que sabemos que son de incumbencia nacional”. Agregó que “después del discurso, mi hijo pidió la palabra y le dijo ‘señor intendente usted está hablando de proyectos, usted está gastando todo lo poco que le queda a Embarcación en esta campaña para renovar su imagen que va a ser en la fiesta de Embarcación. Siempre todo lo que usted nos ha dicho hasta ahora es pura mentira. En doce años de gestión todo lo que ha hecho es insignificante ya que es hora de que renuncie de una vez. Usted ha demostrado que es incompetente y es hora de que se vaya’”.

La respuesta de Llaya no se hizo esperar. Salomón relató que el intendente le contestó al joven “diciendo que era su opinión, que estaba mezclando temas y que el que tenga dos dedos de frente puede ver lo que él hizo con sus obras. Luego un amigo de mi hijo le preguntó qué estaba haciendo por la política de Derechos Humanos en Embarcación”.

Según el hombre, la rectora del colegio tomó la palabra y aseguró que “estamos en democracia, todos tenemos derechos a preguntar y sugerir lo que ustedes deseen con el respecto que se merecen, en este momento le pido disculpas intendente en nombre de toda la comunidad del Instituto”.

Finalmente, Salomón informó que a su hijo “por este hecho decidieron quitarle la bandera y al día siguiente le comunicaron a la madre lo ocurrido, argumentando que mi hijo faltó el respeto”. Y agregó  que en el día de ayer interpuso una acción judicial en los Tribunales de Tartagal.

Fuente: Cuarto poder

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